El término ‘green software’ hace referencia a una nueva corriente en el desarrollo de programas informáticos que busca reducir su impacto ambiental. En un mundo cada vez más concienciado sobre la sostenibilidad y la protección del medioambiente, esta tendencia se ha convertido en una prioridad incluso en el ámbito de la tecnología.
Según la definición de David Contreras, profesor del grado en Matemáticas e Inteligencia Artificial de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería de la Universidad Pontificia Comillas (Comillas ICAI), el ‘green software’ consiste en la práctica de diseñar y desarrollar software de manera que minimice tanto el consumo de recursos como la emisión de carbono durante todo su ciclo de vida.
Pero, ¿cómo se logra esto? En esencia, se trata de optimizar el código del software para que sea eficiente y tenga un menor impacto ambiental. Como explica Contreras, el software está compuesto por un conjunto de instrucciones o líneas de código que indican las tareas que debe realizar un ordenador. Por lo tanto, el diseño y la programación del software determinan si este será eficiente y sostenible o no.
Para garantizar que un programa cumpla con los estándares de ‘green software’, se han establecido principios y códigos de buenas prácticas. En 2021, se fundó la Green Software Foundation, una organización sin ánimo de lucro que tiene como objetivo involucrar a los profesionales del sector tecnológico en la creación de software sostenible. Su misión es transformar la computación en parte de la solución al cambio climático, en lugar de ser parte del problema.
La Green Software Foundation ha identificado seis características clave que deben tenerse en cuenta al desarrollar ‘green software’: eficiencia en emisiones de carbono, eficiencia en el consumo de energía, conciencia sobre el carbono, eficiencia del hardware, medición y compromisos climáticos.
Estos principios se traducen en la práctica en diversas acciones, como reducir el consumo eléctrico durante la ejecución del software, optimizar los algoritmos para minimizar el uso de recursos del sistema, y considerar el impacto ambiental en todas las etapas del ciclo de vida del software, desde el diseño hasta la eliminación.
En resumen, el ‘green software’ representa un enfoque innovador y responsable hacia el desarrollo de tecnología, con el objetivo de mitigar su impacto en el medioambiente y contribuir a la lucha contra el cambio climático.